Riesgo y ventura del Duque de Osuna

Sinopsis

El título completo del libro es "Riesgo y ventura del Duque de Osuna" y fue escrito por Antonio Marichalar.

La siposis del libro en español es la siguiente:

"En el siglo XVII, el Duque de Osuna, uno de los grandes magnates del reino, decide escribir su historia. Con una prosa elegante y un estilo refinado, el duque narra su vida, desde su nacimiento hasta su muerte, paso a paso. Pero, a medida que avanza la historia, se hace evidente que el duque no solo está contando sus experiencias personales, sino que también está tratando de desenterrar los secretos de su familia y de su época.

La obra es una reflexión sobre la condición humana, la ambición, la pasión y la muerte. El duque es un personaje complejo y fascinante, que nos muestra cómo la vida de una persona puede ser tanto una búsqueda de la felicidad como una danza de la muerte.

Fragmento del libro

J. M. DE HEREDIA.

A Osuna no se le llega fácilmente. Broquelado en su escudo, interpone siempre, a la curiosidad pública, sus armas - en palacios, carrozas y libreas-, compuestas por un abigarrado conjunto de los más linajudos emblemas, que soportan leones, rodean cruces, bandas y collares, y cobija el purpúreo manto de Grande, cargado de veneras y forrado de armiños:

L'hermine vierge de souillure

Qui, pour abriter leurs frissons,

Ouate de sa blanche fourrure

Les épaules et les blasons.

De la ducal corona surge el ángel de Toledo, vestido de jaqueles y blandiendo una espada con el lema;

Tu in ea et ego pro ea

. A un lado y otro, el corcel blanco de Girón y el águila de Pimentel, con almas o gritos de guerra. En el interior del escudo se apiñan, se encabritan y se agrupan: los leones de Silva, de Ponce de León, de Enríquez, el toro de Borja, los peces de Salm-Salm, las cadenas de Estúñiga, las lises de La Cerda y Arellano, las calderas de Guzmán, y lobos cebados de Haro; y castillos y paneles, soles, luceros, menguantes, veros y losanges... Y en el centro de todo ese emporio, en ecuson - o más bien «en abismo», como dicen los clásicos.de la heráldica-, cuarteladas con fajas de Beaufort, conchas de Pimentel y bandas de Mendoza, y cercadas de escaques de Cisneros y besantes portugueses, abren su roja herida las armas de Girón de la primera raza: